“Es horrible. Hay que escuchar lo que siente un abusado o una abusada. El viernes, a veces se sabe y a veces no, me encuentro habitualmente con algunos de ellos. En Chile tuve un encuentro y su proceso es durísimo, quedan destrozados ¡destrozados! Para la Iglesia es una gran humillación. Muestra no sólo nuestra fragilidad, sino también, nuestro nivel de hipocresía”.

Son palabras que dijo el papa Francisco en una encuentro que tuvo con jesuitas durante su reciente viaje a América latina, que fueron publicadas hoy por la revista jesuita La Civiltá Cattolica , que dirige el padre Antonio Spadaro.

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